La directora de la Academia, María del Mar Lozano Bartolozzi, declara inaugurado el curso.
Con la lectura del discurso inaugural, “Semblanza de Augusta Emérita”, a cargo del académico numerario y censor de la Real Academia de Extremadura, José María Álvarez Martínez; la lectura de la Memoria del curso 2021-2022 por el secretario y académico numerario de la institución, José Luis Bernal, y las palabras inaugurales de la directora, María del Mar Lozano Bartolozzi, dio comienzo ayer noche el curso académico 2022-2023 de la Real Academia de Extremadura de Extremadura de las Letras y las Artes (RAEX) en su sede del palacio de Lorenzana de Trujillo.
En la lectura de la Memoria del curso anterior, el secretario de la RAEX, José Luis Bernal, se refirió a la recuperación de la normalidad adquirida por la institución tras los años de la pandemia, en los que siguió funcionando pese a todo, para exaltar los valores históricos, artísticos y literarios que les son propios, según sus estatutos. Dio cuenta de la elección de los nuevos académicos correspondientes el 4 de junio pasado: Tomás Calvo Buezas (Tornavacas (Cáceres, 1936) y Dionisio Martín (Cáceres, 1966) y la toma de posesión del académico numerario Jesús García Calderón, el 2 de abril, con su discurso titulado “Una frontera invertida: La Raya de Portugal como antítesis de la frontera”.

Dionisio Martín recibe el diploma de académico correspondiente.
Se refirió a los actos y celebraciones de la RAEX como institución cultural que sirve a la región y al país, entre ellos la asistencia de su directora a los actos del premio Cervantes, el 21 de abril, en los que estuvo presente en la recepción ofrecida por Sus Majestades los Reyes en el Palacio Real, y a las publicaciones realizadas, entre ellas, el Anuario del Boletín de la Academia correspondiente al año pasado (tomo XXIX), el libro “El patrimonio de las obras públicas: del puente romano de Alcántara al diálogo con la actualidad” (Grupo Editorial Sial Pigmalion, S. L., Madrid, 2022, 559 págs.), que ha sido presentado recientemente en la Feria del Libro de Fráncfort y próximamente lo será en la de Guadalajara (México); a la web revisada, que recibe 4.500 entradas de 30 países; al canal abierto en Youtube, en los que figuran los principales actos celebrados por la Academia; los informes preceptivos dados a la Junta de Extremadura; la colaboración con organismos e instituciones y los informes presentados para la declaración de los Bienes de Interés Cultural (BIC); las jornadas y exposiciones celebradas, entre las que destacó el Día de la Academia, en el que se homenajeó a Francisco Becerra, arquitecto del siglo XVI, una de las personalidades más importantes de la arquitectura virreinal, autor de algunos de los edificios más importantes de la América hispana, entre ellos las catedrales de Puebla, México y Cuzco. Finalmente, el secretario de la Academia se refirió a la participación de la institución en la exposición “Las Edades del Hombre” en Plasencia y en la muestra “Spiritualitas in arte hodierna” (Arte y espiritualidad en la era contemporánea”), también en la ciudad del Jerte, así como al programa retransmitido online “Los académicos enseñan Extremadura”, en los que han participado los académicos Sánchez Adalid, Antonio Viudas y Juan Estepa.
El académico y censor de la institución, José María Álvarez Martínez, en su conferencia inaugural “Semblanza de Augusta Emérita”, comenzó recordando al arqueólogo alemán, Adolf Schulten, quien definió a Mérida como “la Roma española”. Recordó la pretérita grandeza de la ciudad de Augusto cantada por Antonio de Nebrija: “Todo se muda con el tiempo y perece con los años. ¿Qué estabilidad tienen las cosas humanas? Aquí donde ahora está Mérida, estuvo en otro tiempo la famosa Emérita, que dio Augusto en premio a sus soldados para que la poblaran.” Seguidamente hizo un recorrido por el puente, “santo y señala de la ciudad”; el dique, construido por los maestros que trajo Felipe II a la ciudad camino de Portugal para tomar posesión del vecino Reino; las poderosas murallas; las conducciones hidráulicas, de las que Sáenz de Buruaga, dijo que “los romanos convirtieron a los emeritenses en millonarios en agua”; el Arco de Trajano: los foros, del que Nebrija dijera: “Aquí donde se alza este pórtico con sus altas columnas, corroídas y desgastadas por las inclemencias del tiempo, estuvo el palacio de la Curia, donde el Senado daba leyes a la plebe y les comunicaba sus mandatos.”. El teatro romano, que sobrecoge por su calidad constructiva y por el estado de conservación que ha llegado a nosotros; el anfiteatro; el circo y, finalmente, el mosaico cosmológico, hallado en la casa del Mitreo, considerado como uno de los más importantes del mundo romano.
Dionisio Martín recibió a continuación su diploma de académico correspondiente, acto al que no pudo asistir el otro académico correspondiente, Tomás Calvo Buezas, por enfermedad.
Por último, la directora de la Academia, María del Mar Lozano Bartolozzi, expresó las intenciones y proyectos para el nuevo curso académico y la ampliación de nuevos horizontes de la institución con la ayuda de las instituciones públicas, agradeció la presencia de autoridades y académicos y declaró inaugurado el nuevo curso.
El acto se inició con la Marcha Académica, de Miguel del Barco, interpretada al piano por el académico correspondiente Emilio González Barroso, y siguió con el Himno de la Real Academia, con letra de Manuel Pacheco y música de Esteban Sánchez, interpretado por Carmen Tamayo (soprano) y María de la Luz Orozco (piano).

El Coro de Cámara de la Escuela Municipal de Música de Trujillo durante su actuación.
Por último, el Coro de Cámara de la Escuela Municipal de Música de Trujillo, dirigido por Juan Francisco Mateos, interpretó varias composiciones musicales y canciones populares extremeñas, acompañados al acordeón por Emilio González Barroso.
Al acto asistieron, entre otras autoridades, el secretario de la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte, Pedro Alvarado, en representación de la Junta de Extremadura; la portavoz del Grupo Socialista en la Asamblea, Lara Garlito; y el diputado de Cultura de la Diputación de Cáceres, Fernando Javier Grande Cano, además del presidente de los empresarios de la ciudad, Juan Carlos Muriel.












